En el día de ayer, la Directora del Colegio N° 423 «Reynaldo Cullen», reportó en sede policial el hurto de un caloventor desde la Sala de profesores de dicho establecimiento. El faltante del artefacto eléctrico fue descubierto entre las 11:30 y las 13:30 horas, aunque no se ha podido determinar el momento exacto de la sustracción. Este incidente se suma a otro robo de similares características ocurrido antes de las vacaciones.
Ante la falta del caloventor, el personal docente inició una búsqueda en grupos de compra y venta de redes sociales, donde lograron identificar un perfil sospechoso. Una profesora contactó a un vendedor que ofrecía un caloventor nuevo por un valor de $13.000. Tras negociar, se acordó un precio de $10.000 y se pactó la entrega del artefacto en una dirección determinada.
El personal policial se dirigió hasta el domicilio mencionado en la denuncia, donde realizaron una requisa domiciliaria sin éxito. Durante la intervención, se solicitó al residente que contactara a su hermana, quien se presentó nerviosa y admitió que su hermano le había entregado el caloventor para su venta. Según mencionó, había vendido el aparato por $13.000 a una mujer, proporcionando el domicilio de la misma. También manifestó que el dinero de la venta se encontraba en la mochila azul marca Adidas, hallando los uniformados alrededor de $7000 en efectivo. La mujer explicó que el resto lo gastó en cigarrillos.
La intervención policial llevó a la aprehensión de ambos implicados y al secuestro del dinero obtenido por la venta. Posteriormente, se procedió a recuperar el caloventor en el domicilio de la compradora, quien hizo entrega del electrodoméstico.
La causa continúa bajo investigación, con los aprehendidos enfrentando cargos por hurto y encubrimiento, según lo dispuesto por el fiscal a cargo. El dinero secuestrado permanecerá bajo custodia judicial mientras se avanza en el proceso legal correspondiente.