La gran mayoría de los adultos de mediana momento con autismo viven sin dictamen, según un estudio.
Esto podría hacerlos “más susceptibles a los problemas relacionados con la momento” y socialmente aislados en la momento avanzadilla, dijeron investigadores del King’s College London.
Estimaron que nueve de cada 10 personas con autismo, de entre 40 y 59 abriles, no habían recibido un dictamen formal, que aumentaba al 97 por ciento para los mayores de 60 abriles.
Una de cada cuatro personas autistas de 19 abriles o menos, y la fracción de las de 20 a 39 abriles fueron no diagnosticadas, según el estudio.
Los hallazgos se producen cuando el NHS enfrenta un diluvio de solicitudes de pruebas de autismo de personas de todas las edades. Ha habido un aumento de 16 veces en personas con sospechas de autismo en los últimos seis abriles, con casi 19,000 mayores de 45 abriles en la registro de paciencia para las pruebas, frente a 1,115 en 2019.
Investigadores del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia en King’s College exploraron patrones de dictamen mediante la revisión de estudios y datos.
El Dr. Gavin Stewart, el autor principal del estudio, dijo: “Estas estimaciones muy altas de un dictamen subdiagnóstico sugieren que muchos adultos autistas nunca se han agradecido como autistas y no se les ha ofrecido el apoyo adecuado.
“Esto podría hacerlos más susceptibles a problemas relacionados con la momento, por ejemplo, estar socialmente aislados y tener una lozanía más escueto.
“Las altas tasas de subdiagnosis además significan que gran parte de nuestra investigación ha pasado por suspensión sistemáticamente una gran proporción de la población autista, potencialmente sesgando nuestra comprensión de cómo las personas autistas envejecen y dejando brechas críticas en políticas y servicios”.
‘Debemos adoptar un enfoque de vida útil’
El autismo es una condición de neurodesarrollo que hace que las personas interactúen de modo diferente a los demás. El estudio encontró que las personas con autismo tienen más aventura de problemas de lozanía física y mental, como trastornos inmunes, depresión y enfermedades cardiovasculares.
Las personas autistas además tienen seis veces más probabilidades de pensar en el suicidio, por otra parte de tener cuatro veces más probabilidades de desarrollar demencia.
La esperanza de vida para las personas con el trastorno es de 75, en comparación con 81 para aquellos que no lo tienen. Sin confiscación, la discrepancia es probablemente aún anciano porque las personas autistas no diagnosticadas serán categorizadas incorrectamente.
La profesora Francesca Happé, coautora del estudio, dijo: “Comprender las deyección de las personas autistas a medida que envejecen es una preocupación de lozanía pública entero apremiante. A medida que envejecen las personas autistas, la naturaleza de los desafíos que enfrentan cambios.
“Debemos adoptar un enfoque de vida útil que finje investigaciones a amplio plazo, integre la atención médica personalizada y amplíe el apoyo social para que las personas autistas envejecidas puedan proceder una vida eficaz y saludable”.
El estudio se publica en la revisión anual de la psicología del incremento.