Una mañana de caos y desesperación se vivió en el Hospital Cullen cuando, pasadas las 07:00, el techo de la cocina, que se encontraba en obras, se desplomó inesperadamente, dejando atrapadas a varias personas en su interior.
De inmediato, agentes del Comando Radioeléctrico y personal de Bomberos de Santa Fe acudieron al lugar, trabajando contrarreloj para rescatar a los afectados. Luego de intensos minutos de tensión, todas las personas fueron evacuadas, aunque un hombre permanece en estado crítico con politraumatismos y tres obreros resultaron heridos por el colapso de la estructura.

Las autoridades policiales continúan en el lugar, realizando señalización preventiva y asistiendo a los damnificados, mientras se investigan las causas del siniestro.
Los cuatro heridos están siendo atendidos por el equipo médico del hospital, en medio de una situación que ha generado gran preocupación en la comunidad.
Algunas versiones indican que el hecho se desencadenó cuando los operarios estaban usando un rotomartillo o percutor que por las vibraciones habría ocasionado la caída de la mampostería.